Como miembro de una organización encargada de la compra de bienes y servicios, me he encontrado con casos en los que las presentaciones, mensajes y documentación relacionados con los artículos que me interesaba contratar no eran del todo ciertos, y lo digo de forma políticamente correcta. Se aplican procedimientos de compra, se lanzan cuestionarios en Excel o en plataformas de compra, pero hay que aceptar las respuestas, sin ningún filtro, ningún algoritmo de comprobación que garantice la veracidad de las respuestas. Un departamento de compras puede comparar las respuestas de los posibles proveedores, evaluar estas comparaciones y determinar cuál es la mejor oferta según las ofertas realizadas. ¿Cómo comprobar la veracidad de las respuestas de los proveedores? Todas las organizaciones de compras minimizarían los riesgos si dispusieran de una plataforma en la que pudieran abordar directamente cada una de las respuestas de los proveedores. Los enlaces en las respuestas, o los enlaces en los propios sitios web de los proveedores potenciales, llevarían a una plataforma donde se podrían encontrar pruebas verificadas para convertir las respuestas de los proveedores en certezas objetivas. A nivel del consumidor final, el escenario es similar, lógicamente a menor escala. Cuando recorro los pasillos de una tienda de ropa y busco productos que reúnan determinadas características, productos de una empresa que respete el medio ambiente, fabricados con productos reciclados, fabricados en un país con el que mi gobierno no tenga discrepancias sobre derechos fundamentales, ¿cómo puedo tener una verificación inmediata de cada una de estas cuestiones? El consumidor puede dar otro uso a su móvil. Cada producto puede tener una etiqueta, un código QR, que se puede capturar desde la cámara del móvil, a partir del cual se puede obtener inmediatamente la verificación de cada una de las características asociadas al producto, dónde se produce, cómo, a partir de qué ingredientes, con qué recursos materiales y humanos, etc.
Todo esto es posible hoy en día, y lo es gracias a plataformas como swearit.io. Este tipo de plataforma debe ser:
- tener la garantía de que la información está segura. Hoy en día, las plataformas basadas en blockchain son necesarias para garantizar la seguridad y veracidad de la información. Blockchain es fundamental a la hora de proporcionar y validar todas y cada una de las afirmaciones que el fabricante pone en el mercado.
- gestionar la información significativa, la que minimiza los riesgos para los compradores: o Catálogos y ciclos de vida de los productos. o Herramientas para compartir información, opiniones… o Capacidad de integración con terceros (ERPs, PIMs, QMs…) Hoy en día todos buscamos en Internet basándonos en palabras, etiquetas…, pero ha llegado el momento de que el resultado sea la verificación fiable de los mensajes que nos transmiten los proveedores, tanto en entornos B2B como B2C.
¡¡¡QUE SOLUCIÓN PARA COMPRAR BIEN!!!
Como miembro de una organización encargada de la compra de bienes y servicios, me he encontrado con casos en los que las presentaciones, mensajes y documentación relacionados con los artículos que me interesaba contratar no eran del todo ciertos, y lo digo de forma políticamente correcta. Se aplican procedimientos de compra, se lanzan cuestionarios en Excel o en plataformas de compra, pero hay que aceptar las respuestas, sin ningún filtro, ningún algoritmo de comprobación que garantice la veracidad de las respuestas. Un departamento de compras puede comparar las respuestas de los posibles proveedores, evaluar estas comparaciones y determinar cuál es la mejor oferta según las ofertas recibidas. ¿Cómo comprobar la veracidad de las respuestas de los proveedores? Todas las organizaciones de compras minimizarían los riesgos si dispusieran de una plataforma en la que pudieran abordar directamente cada una de las respuestas de los proveedores. Los enlaces en las respuestas, o los enlaces en los propios sitios web de los proveedores potenciales, llevarían a la plataforma donde se podrían encontrar pruebas verificadas para convertir las respuestas de los proveedores en certezas objetivas. A nivel del consumidor final, el escenario es similar, lógicamente a menor escala. Cuando recorro los pasillos de una tienda de ropa y busco productos que reúnan determinadas características, productos de una empresa que respete el medio ambiente, fabricados con productos reciclados, fabricados en un país con el que mi gobierno no tenga discrepancias sobre derechos fundamentales, ¿cómo puedo tener una verificación inmediata de cada una de estas cuestiones? El consumidor puede dar otro uso a su móvil. Cada producto puede tener una etiqueta, un código QR, que se puede capturar desde la cámara del móvil, a partir del cual se puede obtener inmediatamente la verificación de cada una de las características asociadas al producto, dónde se produce, cómo, a partir de qué ingredientes, con qué recursos materiales y humanos, etc. Todo esto es posible hoy en día, y es posible desde plataformas como swearit.io. Este tipo de plataforma debería:
- tener la garantía de que la información está segura. Hoy en día, se requieren plataformas basadas en blockchain para garantizar la seguridad y veracidad de la información. Blockchain es fundamental a la hora de proporcionar y validar todas y cada una de las afirmaciones que el fabricante transmite al mercado.
- El sistema Blockchain permite la gestión de información significativa, lo que minimiza los riesgos para los compradores: o Catálogos y catálogos del ciclo de vida de los productos. o Herramientas para compartir información, opiniones… o Capacidad de integración con terceros (ERP, PIM, QM, etc.). Hoy en día, todos buscamos en Internet basándonos en palabras, etiquetas…, pero ha llegado el momento en que el resultado debe ser la verificación fiable de los mensajes transmitidos por los proveedores, tanto en entornos B2B como B2C.