Parar la actividad económica de una empresa de un día para otro tiene graves consecuencias, pero parar un país en cuestión de días tiene consecuencias como las que estamos viviendo y hemos vivido. No es necesario analizar los datos del sector turístico de 2020 para darse cuenta de que ha sido uno de los peores de la historia, si no el peor. Las cifras son demoledoras: el turismo en el mundo ha caído un 87%, y en Europa un 85%, según los informes de la OMT. La reactivación del turismo es una necesidad y el objetivo número uno de muchos países. Por ello, muchos países de la UE, como Alemania, Italia y Francia, están aprobando subvenciones para ayudar a las asociaciones y empresas turísticas.
Alemania encabeza la lista con 50.000 millones de euros en ayudas a su sector, seguida de Francia, con 20.000 millones, e Italia, con 11.000 millones, como tercer país de la clasificación. España, siendo el segundo país del mundo con más visitantes, sólo invierte 7.000 millones de euros en ayudas y subvenciones a las empresas. Además, según algunos expertos, la decisión del Gobierno español llega tarde, a pocos meses del verano.
El turismo rural puede ganar protagonismo y ser una de las claves de la reactivación. Las reservas en alojamientos rurales están aumentando ligeramente, por lo que la OMT dará más apoyo y promoción. Y con ese fin se ha convocado un concurso para identificar las mejores ideas que ayuden a las comunidades rurales a recuperarse de los efectos de la pandemia COVID-19. Se espera que esta tendencia se acelere con la reanudación del turismo. El plazo de presentación de candidaturas finaliza el 1 de julio de 2021 y los ganadores serán invitados a participar en la Asamblea General de la Organización Mundial del Turismo, que se celebrará en Marrakech (Marruecos) en octubre.
Por otro lado, las llegadas a Europa han caído un 85% a principios de enero de 2021, pero se espera que Occidente sea un referente a seguir en la recuperación del turismo.
«Ahora más que nunca, el turismo necesita un apoyo y una acción políticos firmes. conjunta. La armonización de las normas sanitarias y de viaje es esencial para restablecer confianza y reactivar el turismo», afirma Pololikashvili, Secretario General de la OMT.
Si observamos el mapa, Asia es la más afectada en comparación con otros continentes, debido al origen de COVID-19, Wuhan. La confianza y el entusiasmo de los viajeros en Asia han decaído a raíz de la crisis. Pero China, tras 1 año de pandemia, apenas tiene casos. Y según varias fuentes, parece haber «vuelto a la normalidad» en la mayor parte de su territorio, aunque muchos creen que esos datos no son efectivos al 100%. El Banco Asiático de Desarrollo (B AD) ya ha presentado estrategias para revertir la situación actual, en las que la sostenibilidad es uno de los principales objetivos.
